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Durante 16 años, en Francia hubo tres operadores móviles con licencia para explotar redes propias. Hasta que las autoridades decidieron que ya era hora de equiparar el mercado francés con los usos europeos que marcan en cuatro el umbral de competencia deseable. La cuarta licencia acabaría adjudicándose durante la fase baja del ciclo económico y con un mercado en vías de saturación. Distintas circunstancias se han unido para que la entrada de un nuevo operador, Free Mobile, provocara un seísmo en el mercado. La autoridad reguladora, Arcep, ha advertido que de desatarse una guerra de precios, el sector podría sacrificar hasta 10.000 empleos en los próximos cinco años. Leer más
Salvado el último obstáculo, la aprobación del gobierno chino, Google ya puede consumar la absorción de Motorola Mobility, que lleva esperando desde agosto del año pasado. Tiempo habrá de saber y escribir sobre lo que se propone hacer Google con su nueva propiedad; conjeturas no faltan, pero una cosa es segura: la cartera de patentes acumulada por el histórico fabricante de móviles le será muy útil en el dilatado conflicto con Apple. La noticia tiene otra lectura posible: hasta ahora, toda adquisición transnacional debía contar con la luz verde de Washington y Bruselas, y a veces con la de otros países; a partir de ahora, Pekín se erige como tercer polo regulador mundial.
Probablemente Google no calculó bien inicialmente este problema, que le ha costado ocho meses de espera. Los motivos por los que ha sido necesario el consentimiento son concurrentes: 1) Motorola tiene en el país una fábrica desde 2001, y 2) una ley de 2008 otorga al ministerio de comercio la facultad de actuar como autoridad antitrust en cualquier transacción que afecte a una empresa que – si cumple el requisito de operar en China – facture 400 millones de yuanes (65 millones de dólares) dentro del país o 10.000 millones de yuanes (1.570 millones) globalmente. Como el mercado chino es muy apetecido, es lógico suponer que el número de empresas que incurrirán en este supuesto irá en aumento.
El resultado previsible es que casi cualquier acuerdo de M&A de envergadura podría acabar necesitando el permiso gubernamental. Ha habido casos menos notorios: Caterpillar, Nokia Siemens y Novartis han visto bloqueadas transacciones durante meses, y la compra de la farmacéutica Wyeth por Pfizer fue aprobada sólo a condición de vender su negocio de vacunas en China. También la compra de Sanyo por Panasonic, a priori un asunto puramente japonés, tuvo que esperar meses por la aprobación de Pekín.
En los últimos dos años, a AMD le ha pasado casi de todo: errores estratégicos, varios trimestres en pérdidas (o al borde de ellas), revocación del equipo directivo, segregación de su actividad de fabricación, y todo con el resultado de quedar rezagada con respecto a Intel en el lanzamiento de una nueva generación de procesadores para portátiles. La brecha entre ambas ha llegado a calcularse en unos dos años, pero la diferencia entre las cuotas de mercado no se ha movido significativamente: un 80% para Intel, un 20% para AMD, redondeando. La llegada de una nueva generación de portátiles y la inminencia de Windows 8, invitaban a AMD a ponerse otra vez en batalla. Y ahí está. Leer más
La última vez que este blog se ocupó de la OPV de Facebook fue el 9 de mayo, pero el pasado fin de semana tuvo muchas visitas la entrevista del año pasado a Javier Oliván – responsable de expansión internacional y estrategia móvil – que publiqué a mediados del año pasado, y eso quiere decir que el asunto despierta interés. El problema es que de momento no tengo nada nuevo que decir sobre la aventura bursátil de Mark Zuckerberg & Co, hasta que vea el comportamiento de la acción en las próximas sesiones. No obstante, he recibido mensaes alusivos como estos: 1) “Empiezo a estar harto de Facebook”. Yo también. 2) ¿cómo explicas el desbordante entusiasmo de El País, tan distinto del escepticismo de la prensa anglosajona? Por papanatismo. 3) “¿Por qué no te mojas sobre el futuro de Facebook en bolsa?” Porque no soy broker ni inversor, sólo periodista.
Dicho esto, he encontrado un hilo común para las tres cuestiones que me plantean. La formidable operación financiera de Facebook ha sido perfectamente orquestada, con un precio de salida calculado de modo que maximiza la plusvalía de los accionistas existentes y mantiene vivo el interés de nuevas camadas de inversores, al menos hasta que se puedan juzgar los resultados del primer trimestre. En algún momento, Facebook tendrá que justificar un valor bursátil que es 108 veces superior a sus ingresos de los últimos doce meses.
El hecho de que hacia el final de la primera sesión la cotización cayera por debajo del precio inicial y tuviera que ser sostenida por los bancos implicados, no es inusual, pero puede verse como un signo de que la operación es un artificio. No quiero decir que Facebook no tenga futuro; para empezar, cuenta con 16.000 millones y acciones frescas para comprar muchas cosas. En realidad, la principal amenaza para Facebook es el aburrimiento. ¿Quién ha dicho que no me mojo?
En SAPphire, el evento anual de SAP en Orlando [la edición europea está convocada para noviembre, nuevamente en Madrid, como en 2011] tuvo, como cualquiera podía suponer, un aire de confrontación con Oracle. HANA, la plataforma de análisis en memoria, está disponible desde hace ahora un año, y si todo sale bien debería ser un instrumento para que los clientes de SAP – se dice que hasta un 60% vinculan sus aplicaciones con la base de datos de Oracle – se liberen de ese vínculo, aprovechando las nuevas tendencias tecnológicas. Claro que, para alcanzar ese objetivo en torno a 2015, HANA necesitará reclutar evangelistas, administradores, consultores… y clientes. Leer más
A medida que se acerca el día de la salida a bolsa de Facebook, se elevan las apuestas y también sube la toxicidad de las informaciones. La compañía y sus banqueros han decidido que el precio de salida será el máximo de la horquilla, 38 dólares por acción; lo que equivale a una valoración inicial de 104.000 millones de dólares. Si han tomado esa decisión, será porque les consta que las órdenes de compra superarán los 14.700 millones de dólares de la oferta. Y calculan que los inversores minoristas se quedarán sedientos.
No faltan escépticos. Por ejemplo, ese inversor inseguro que declara: “a ese precio, demasiadas cosas tendrían que salirles bien para que la inversión se justifique por un retorno a largo plazo”. Hay muchos así. En medio de la euforia, una mala noticia inoportuna. General Motors ha cancelado su campaña de 10 millones de dólares en la red social. No es una muestra de confianza, desde luego.
Al hilo de lo anterior, he leído un comentario inteligente: Zuckerberg ha convencido a medio mundo de que lo suyo es una red social, pero en la práctica es una compañía de medios, que vive de la publicidad y tendrá que pelear por ella en un mercado muy competitivo, pero de poco le valdría reventar los precios, porque su producto no es comparable. Martin Sorrell, chairman del grupo de agencias WPP, dice que ni siquiera está seguro de que la publicidad funcione en un entorno dominado por el ruido de la conversación. Colofón: lo que Facebook necesita es diversificar sus fuentes de ingresos.
La noticia tiene su punto. Kaspersky Lab, célebre empresa rusa de seguridad, ha sido contratada (o autorizada, según se mire) por Apple para practicar un análisis de los problemas de seguridad que presenta el sistema operativo Mac OS X. El caso no tendría mucho de particular – es un recurso habitual para otras compañías, pero no se conocen precedentes en Apple – si no fuera porque hace pocas semanas Eugene Kaspersky, fundador y CEO, declaraba que “en materia de seguridad, Apple está hoy como estaba Microsoft en 2002”. Tras los ataques del malware Flashback, Apple parece haberse tomado el problema en serio, hasta el extremo de acoger un punto de vista crítico. Leer más
La historia podría ser graciosa, si no tuviera elementos inquietantes. El colega Don Reisinger cuenta en CNET que la semana pasada alguien descubrió que, cuando un usuario del iPhone 4S (sospecho que el propio Reisinger) preguntaba al asistente virtual Siri “¿cuál es el mejor smartphone?”, la respuesta era “el Nokia Lumia 900”. Bueno, así ocurría hasta que, alertados por un video en YouTube, los programadores de Apple lavaron el cerebro del asistente para dictarle otra respuesta sin compromiso: “el que estás usando” [que, obviamente, sólo puede ser un iPhone 4S ]. La base del equívoco está en que Siri extrae muchas respuestas del buscador Wolfram Alpha, que en este caso la obtuvo procesando comentarios publicados en sitios de Internet. Y ocurre que la ratio media es más alta para el smartphone de Nokia que para el de Apple.
De haberlo pensado mejor, Apple quizás hubiera podido hacer pasar el episodio como un signo de objetividad de su simpático (y por ahora torpe) invento. Pero el argumento podría haber servido a Nokia para una campaña publicitaria como las que se gastan en EEUU. Cuando amaneció el lunes, Siri había recuperado ese proverbial sentido del humor que regocija a los adictos a Twitter: para la misma consulta formulada de viva voz, el asistente tenía preparada otra respuesta: “¿estás de broma?”. Por cierto, para que nadie dude de su objetividad, cuando se le pregunta por la mejor tableta, Siri suelta esta respuesta: “el iPad, y no es sólo mi opinión”.
Probablemente, el asunto no dará para mucho más; al fin y al cabo, Siri es un servicio en beta, y como tal puede cometer errores.
Eran cada vez más evidentes las dificultades de Research in Motion (RIM) para sostener una lucha desigual contra Apple y Google. Desigual porque mientras estos ganaban el aprecio de las nuevas generaciones, la plataforma BlackBerry se atrincheraba en la fidelidad de millones de usuarios. La cuota de mercado de aquellos sube, la de la empresa canadiense desciende. Tras diversas vicisitudes internas, BlackBerry parece dispuesta a reaccionar: a comienzos de mayo, en su conferencia anual de desarrolladores, el nuevo CEO, Thorsten Heins, presentó en Orlando (Florida) un prototipo de smartphone basado en el nuevo sistema operativo Blackberry 10. Esta será su carta, y el mercado no tolerará errores. Leer más