Desespera a cualquiera ver la velocidad con la que se borra el icono que marca el nivel de batería de un móvil, y ver atónitos cómo las ´páginas` se ralentizan hasta el desencanto. En ese momento, el usuario se pregunta si habrá hecho una buena compra, o si habrá contratado el servicio que sus hábitos aconsejan. Ni una cosa ni la otra, se deduce del informe Mobile Application Rankings Report 2014, publicado por Alcatel Lucent. Todo es fruto del juego entre las cargas de datos y la señalización que requieren las aplicaciones para lograr un buen rendimiento. Por eso vale la pena consultar un estudio que analiza las 39 principales apps móviles del mercado, para identificar las más damnificadas.
El procedimiento analítico empleado en el estudio mide el impacto – más bien, la penalización – de las apps más populares sobre las inversiones de capital (capex) de los operadores de redes móviles, sobre los usuarios que tienen planes de datos contratados, y sobre el ciclo de vida de las baterías de sus dispositivos. Entre esas 39 aplicaciones analizadas se encuentran Google Search, Facebook, WhatsApp y YouTube. La pena es que se basa en información originada por 15 millones de usuarios en Norteamérica, Oriente Medio y Asía, excluyendo a Europa, pese a su tamaño y a que Alcatel Lucent tiene su sede en París. En fin, habrá razones que la razón no entiende.
Quien piense que las aplicaciones para móviles o, en muchos casos, gratuitas, se equivoca o no conoce la definición de coste. La métrica que emplea el estudio es sencilla: combina dos variables – sólo dos – porque, como asegura, «el volumen y la señalización proporcionan la información clave para entender el impacto que se quiere investigar». El volumen de datos, obviamente, porque representa a la vez el ancho de banda requerido para entregar la aplicación (lo que a su vez influye en el capex del operador) y la contribución de la app por sí misma a la merma del plan de datos del consumidor. La señalización – someramente, el número de veces que un dispositivo y la red establecen comunicación – es la segunda variable porque, además de utilizar los recursos de la red, reduce la vida de la batería.
El primer criterio que anima la encomienda del estudio por parte de Alcatel Lucent es conocer la repercusión de una app determinada sobre las redes de sus clientes, los operadores: identificar cuáles consumen más recursos y, por tanto, merecen una gestión minuciosa para proporcionar a los usuarios una experiencia respaldada por el rendimiento adecuado, el coste más bajo posible y una vida aceptable de la batería de su dispositivo.
Sin olvidar, claro, que este conocimiento ayudaría a los departamentos de marketing en la búsqueda de fórmulas para empaquetar ofertas sostenibles, que incluyan aplicaciones populares pero compatibles con una baja señalizacion y un coste reducido de entrega de los datos sobre las distintas gamas de dispositivos y tecnologías de red.
Los consumidores se preguntan qué apps son susceptibles de descarrilar su plan de datos y cuáles obligan a buscar un enchufe más a menudo. Las aplicaciones que miden el rendimiento de una batería no ofrecen información acerca de su eficiencia ni incluyen mecanismos para reducir la sangría de energía, y las llamadas utility apps analizan el volumen de datos generado pero no su eficacia comparada.
Por otro lado, un mejor conocimiento de estas circunstancias facilitará a los desarrolladores información para comparar el rendimiento de sus apps con respecto a las de sus competidores. La introducción de nuevas técnicas de programación es propicia para alcanzar ese objetivo. A partir de estos principios generales, el informe se adentra en una serie de cuadrantes que miden el grado de penalización sobre las redes.
* Cuadrante de Alto Impacto. Las 12 apps incluídas en este segmento se caracterizan por un alto consumo de recursos de señalización y ancho de banda. Google Search es la que más penaliza ambas métricas, y el perfil de Facebook es bastante similar al del buscador. A continuación se sitúan WhatsApp, la mensajería de Facebook y YouTube. No es de extrañar que esta última sea la más onerosa en ancho de banda y consumo de datos.
¿Cómo se puede reducir el impacto de estas 12 aplicaciones? ¿Es su popularidad lo que las lleva al cuadrante, o existen otros factores humanos o de diseño? Para responder a estas cuestiones, el informe introduce el perfil de coste por usuario asociado. Las popularísimas WhatsApp, Google Search, Facebook y Twitter, lo tienen más alto, mientras que Yahoo! Mail, Gmail y Yahoo! Search aparecen en lo más bajo de la escala. En una zona intermedia están Facebook Messenger, Hotmail y YouTube.
Obsérvese que, en general, las apps de correo electrónico incluidas en este cuadrante tienen un perfil de coste más bajo que el resto.»Fueron las primeras en aparecer, se han ido optimizando a través de sucesivos ciclos de diseño y mucho de los participantes de la cadena de valor se han beneficiado de este esfuerzo», valora el informe de Alcatel Lucent.
* Cuadrante de Alto Volumen de Datos. Estas apps se caracterizan por una elevada necesidad de ancho de banda. Los proveedores de servicio saben que el consumo de datos se dispara cuando los usuarios descargan contenidos de iTunes, ven películas sobre Netflix o envían fotos por Facebook o Instagram. Sin embargo, también el streaming de radio (Pandora) o el uso de Pinterest son consumidores voraces de datos.
* Cuadrante de Alta Señalización. Las apps de redes sociales dominan este apartado, puesto que requieren un servidor de aplicaciones encargado de notificar a un amplio círculo social cuándo un ´amigo` está en línea o envía un contenido. Este grupo tiene niveles de popularidad similares, pero presenta diferencias de consumo de radio y batería. Tango es la primera que se movería al Cuadrante de Alto Impacto por su mayor carga de datos. Facebook Channel, Kik y Skype seguirían el mismo camino si introdujeran nuevas funcionalidades o su popularidad creciera. El cuadrante se completa con BBM (BlackBerry Messenger), Viber, Yahoo! Mobile Windows Live Messenger.
* Cuadrante de Bajo Impacto. Este grupo incluye Google Maps, Dropbox, Zynga, aplicaciones para redes sociales como Nimbuzz o Palringo, y otras de información meteorológica. Son populares, ofrecen bajos costes relativos en recursos de radio y ancho de banda, por lo que son buenas candidatas a entrar en planes de datos gratuitos. Algunas serían opciones razonables para su empaquetamiento. El informe advierte que Office 365 y Zynga deberían optimizarse antes de pensar en incluirlas bajo la modalidad bundling.
Establecida la incidencia sobre la red, el estudio de Alcatel Lucent dedica su última parte a analizar el coste de las apps más populares sobre el consumo de datos y de energía. Una vez más, los parámetros esenciales son la señalización y el volumen medio por usuario, aunque se incluye un factor humano: si la app en cuestión es particularmente atractiva, más usuarios se verán compelidos a utilizarla, elevando su coste.
Un detalle interesante es la comparación de las apps de correo. Revela que Yahoo! Mail, Gmail y AOL Mail son las que tienen costes más bajos en esta categoría. Los desarrolladores han logrado reducir el volumen de señalización descargado el correo cuando el usuario abre el dispositivo en lugar de enviarle continuas notificaciones según van llegando mensajes.
En lo tocante a las redes sociales,entre las apps de mayor coste para el usuario se encuentran WhatsApp, Facebook y Tango, que normalmente transportan pocos datos pero son intensivas en señalización, porque facilitan la compartición de vídeos y fotos. Tiene sentido la inclusión de Instagram, pero sorprende la compañía de Twitter: «esperábamos que su posición se adecuara más a las apps de mensajería de texto – dicen los autores –pero su volumen de datos por usuario es el quinto más alto de la categoría».
En cuanto a las especializadas en vídeo, cuyo uso crece velozmente, queda demostrado que YouTube es, además de intensiva en datos, la que agota la batería más rápidamente. Es probable que se deba a que sus usuarios saltan de un vídeo al siguiente; por contraste, los de Netflix suelen ver vídeos más largos, lo que conlleva menos señalización entre dispositivos y red.
Mientras se optimizan los diseños de aplicaciones y redes, lo que requiere tiempo, las conductas más sensatas siguen siendo las obvias: apegarse a WiFi el mayor tiempo posible y neutralizar la sincronización en los desplazamientos. Es preferible a ver cómo la velocidad de los datos traza una asíntota tendente a cero y cómo la luz de la batería se apaga. Eso sí, con el cable de red en perfecto estado de revista.
[informe de Lola Sánchez]