Otra vez metidos en harina. Hoy se ínicia en Las Vegas el International CES [también conocido como Consumer Electronics Show]. El primer rasgo significativo es la ausencia de Microsoft, que secunda así a marcas no menos conspicuas (Apple, Google, Amazon) que prefieren presentar sus productos en espacios propios y en las fechas que mejor se acomoden a sus ciclos de producto. Para ellas, el gigantismo del CES resulta contraproducente, porque diluye su protagonismo. El papel estelar que durante años ha tenido Steve Ballmer como ponente inaugural de los últimos años (y por el que Microsoft pagaba una cantidad importante) ha sido ocupado por Paul Jacobs. Es otra manifestación del ánimo expansivo de Qualcomm, y a la vez un síntoma de la transición que vive esta feria, crecientemente influída por las tecnologías de movilidad.
Como siempre, el CES 2013 será un escaparate privilegiado para presentar nuevos dispositivos. Pero la proximidad del ascendente Mobile World Congress, a finales de febrero, decanta los anuncios. Incluso en aquellos productos que no son explícitamente móviles, el CES necesariamente refleja la tendencia. Durante décadas, las novedades destinadas al entretenimiento doméstico tenían la máxima prioridad; recientemente, la movilidad ha pasado al primer plano. Esto implica que, a gusto o a disgusto, la feria de Las Vegas tiene que redefinir su identidad.
No habrá muchos smartphones realmente nuevos, pero los que se muestren subrayarán dos pautas: procesadores más potentes y pantallas más grandes (el vídeo manda). Es la ocasión escogida por dos marcas chinas para redoblar su ofensiva en el mercado estadounidense [y el mes próximo en Europa]: Huawei subirá el listón con un modelo de 6,1 pulgadas, Ascend Mate, y un Windows Phone 8, Ascend 2. Por su parte, ZTE lanzará su nuevo Grand S, apostando también por una pantalla de 5 pulgadas. Es la hora de los llamados phablets.
Los ultrabooks, que tanto interés despertaron en el CES 2012, van a pasar por Las Vegas discretamente, y se dice que también este segmento de la industria optará por Barcelona, donde aparecería una nueva camada de hìbridos laptop/tablet, a la vista de que la demanda no ha digerido bien la anterior. Por tanto, el entretenimiento vuelve a ser el centro de atracción mediática en Las Vegas. Los modos de consumir contenidos de televisión han cambiado en pocos años, en favor de los servicios bajo demanda y los dispositivos móviles, y la réplica de la industria no es otra que acentuar la apuesta por el televisor conectado.