3 Ago
Los abogados de Oracle acaban de sufrir una segunda derrota en pocos meses, con la sentencia de un tribunal californiano que da la razón a HP en el litigio entre ambas empresas acerca del soporte al software de aquella instalado en los servidores Itanium. Este blog ha publicado varios análisis que me eximen de entrar aquí en más detalles. La sentencia dice que el acuerdo firmado en septiembre de 2010, cuyo objeto era “normalizar” las relaciones entre las partes tras la contratación del ex CEO de HP, Mark Hurd, como presidente de Oracle, tiene valor contractual y es aplicable a la materia en disputa. Por tanto, Oracle no puede suspender unilateralmente el soporte a la plataforma Itanium, ni discriminarla con respecto a otras en la disponibilidad de versiones y actualizaciones.
El juez ha optado por no fijar una compensación económica, sugiriendo que las partes deberían llegar a un acuerdo o, en su defecto, el monto será fijado por un jurado. HP ha estimado en 500 millones de dólares las ventas perdidas y, potencialmente, hasta 4.000 millones antes de 2020, consecuencia del bloqueo a Itanium. Los antecedentes permiten dudar de que pueda haber acuerdo, y la primera reacción de Oracle ha sido anunciar que recurrirá la sentencia.
Quedan varias incógnitas abiertas, una de ellas la situación en la que queda Mark Hurd, cuyo fichaje por Oracle (y, por tanto, del acuerdo). Supuestamente, fue Hurd quien negoció que la frase «Oracle will continue to offer its product suite on HP Platforms in a manner consistent with [the HP-Oracle] partnership that has lasted for over 25 years» se incluyera en el texto. Ahora forma parte de una sentencia judicial.
Es obvio que HP se ha apuntado una victoria moral, pero el perjuicio material no tiene marcha atrás: en el ánimo de aquellos de sus clientes que son a la vez usuarios de productos Oracle, ha quedado sembrada la desconfianza sobre la continuidad de la plataforma. Por esto, es muy probable que HP acelere los trabajos para reconvertir la familia de servidores Itanium en la arquitectura Xeon de Intel. Están en marcha desde hace meses, pero no se reconocerán públicamente mientras Oracle no haya aceptado su derrota, algo que no conjuga en la mentalidad de Larry Ellison, ya se trate de vela o de negocios.