Retomando la conclusión de la primera parte: no consta que la señora Whitman sepa jugar al mus, pero algún aficionado diría que ha lanzado un órdago a la grande: a menos que el consejo y los accionistas tengan un plan de viaje alternativo, ya saben que este va a durar cinco años. A lo largo del analyst day, cada división y cada unidad de negocio tuvo tiempo para una exposición razonada de sus objetivos. La ronda empezó por la que últimamente ha estado más cuestionada por los inversores, Enterprise Services. El primero en salir a escena fue Mike Nefkens, veterano de EDS, hasta hace poco director para EMEA de esta rama de negocio, y ahora su responsable global (en funciones).
Por primera vez, vino a decir Whitman, la compañía “tiene un plan de acción detallado y bien elaborado” para Enterprise Services, que – lo subrayó dos veces – es el segundo proveedor mundial de servicios y factura 25.000 millones de dólares. Pero, yendo al grano, la presentación de Nefkens podría resumirse en una frase: “tenemos que ser rentables”. Retomando el hilo de lo que antes había dicho Whitman, afirmó que “las prácticas de contratación inadecuadas” han permitido que HP hiciera “demasiadas concesiones”.
Consciente de que el asunto tiene morbo entre los analistas, tras la amortización contable reciente, reconoció que “históricamente EDS se construyó como una colección de contratos altamente ´customizados`, con poco o ningún apalancamiento de costes a través de la cartera”. Ha habido discontinuidad en el liderazgo, ciertamente, pero “financieramente, la erosión de los márgenes, es consecuencia de múltiples errores de ejecución […]” y de otras causas recientes: la caducidad o renegociación a la baja de cuatro grandes contratos, y la decisión de HP de ser más selectiva en la firma de acuerdos. En 2010, los márgenes fueron del 10%, ahora andan por el 3% y en el año fiscal 2013 estarán en el rango del 0 al 3%. A largo plazo, el objetivo es elevarlos hasta el 7% o 9%.
Contra lo que generalmente se dice – apostilló Nefkens – el negocio de servicios TI crece: tanto en el espacio tradicional como en los nuevos servicios emergentes. El tradicional (datacenter, aplicaciones, BPO y outsourcing) es un mercado total de 430.000 millones de dólares y crece en torno al 2%. Los emergentes (cloud, seguridad, movilidad) suman 120.000 millones, pero crece al ritmo del 12%. A largo plazo, HP pretende que el 20% de sus ingresos de servicios venga de la segunda categoría.
También se esperaba con interés el turno de Todd Bradley, VP del grupo Printing and Personal Systems (PPS), un negocio de 65.000 millones de dólares que – lo había dicho Whitman – podría por sí mismo ocupar un puesto entre las 50 grandes empresas del ranking de Fortune. Bradley describió así el reto: “[la fusión] implica consolidar nuestra cadena de suministros, alinear dos equipos de ventas, recortar la función corporativa y reducir las líneas de producto en un 30% antes de 2014”.
Presumió Bradley de que HP es “la mayor y más rentable empresa de PC del mundo, y el perenne líder del mercado” [nada dijo de la feroz batalla que libra con su perseguidor, Lenovo, que parece estar a punto de arrebatarle el primer puesto del ranking]. Pronosticó que “el mercado de PC seguirá una línea plana, potencialmente hasta 2015, pero el de estaciones all-in-one va a crecer, y somos entusiastas con la nueva categoría de dispositivos híbridos, que completan nuestra cartera”.
La división que antes se llamó Imaging and Printing Group, ahora bajo la batuta de Bradley, hace frente a dificultades macroeconómicas junto a cambios seculares en el mercado. “Para responder, y a la vez defender y expandir nuestro negocio de consumibles, tenemos que innovar introduciendo nuevos modelos de negocio” . Gracias al cambio imparable de la impresión analógica a digital, el mercado potencial total se estima que pasará de 300.000 millones de dólares en 2015.
Turno para Dave Donatelli, VP del Enterprise Group, cuya facturación de 32.000 millones de dólares abarca servidores, almacenamiento, redes y, a partir de este año, servicios tecnológicos. “Este es un negocio de crecimiento moderado – lo había definido Whitman – con una oportunidad real de crecimiento rápido y expansión de márgenes”.
El enunciado central de Donatelli fue el papel que corresponde a HP en las grandes tendencias de la infraestructura TI. “Si interpretamos bien esas tendencias, y las contrastamos con los mercados a los que nos dirigimos, vemos que tienen ciertas cosas en común: son grandes mercados y crecen, y HP se dirige a ellos con su propiedad intelectual. […] cuantos más productos vendemos, más alto es el margen que podemos obtener. Y más alto que el que HP obtiene en otros negocios tradicionales”.
En la imposibilidad de resumir aquí el conjunto de áreas y productos bajo el mando de Donatelli, dos cuestiones han llamado la atención del autor de este blog: 1) el proyecto Moonshot, iniciativa para desarrollar una nueva categoría de servidores con base en procesadores ARM y Atom de bajo consumo energético, y 2) el anuncio, 24 horas antes, de un controlador SDN, con el que HP se suma a la corriente de virtualización de las redes [asunto que, evidentemente, habrá que tratar en otro momento].
Preguntado por la situación en que ha quedado el contencioso con Oracle acerca de Itanium y su impacto sobre el negocio de sistemas críticos, Donatelli dio dos respuestas: 1) la justicia ha dado la razón a HP, y Oracle ha vuelto a portar su software para los sistemas Itanium, 2) la adopción de los sistemas basados en Unix declina para toda la industria, lo que no es óbice para que otras tendencias sustituyan ese flujo de ingresos.
George Kadifa lleva tres meses en HP, que lo ha fichado para dar un nuevo impulso al negocio de software. A priori una rama menor de la compañía (su facturación es de 4.000 millones de dólares) pero opera en un mercado de impetuoso crecimiento y rápida evolución tecnológica. El mayor problema de Kadifa será la integración pendiente de las numerosas empresas que HP ha adquirido en los últimos años; en particular, los analistas se interesaron en saber qué piensa hacer con Autonomy.
“Para nosotros, Autonomy es un proyecto de largo alcance”, dijo cuando le preguntaron por el alto precio pagado por una empresa que, al poco de la compra, ha perdido casi todo el equipo directivo anterior. Su argumento merecería por sí mismo un post (otro día, de acuerdo): “Autonomy aporta una gran tecnología, pero su marco operativo todavía no es escalable, y esto es lo que tenemos que desarrollar, junto con un modelo de venta que también vamos a cambiar”
Cerró la lista de ponentes Bill Veghte, que desde su incorporación a HP – en tiempos de Apotheker – se ha elevado sucesivamente de responsable de software a jefe de estrategia y, ahora, chief operating officer a la vera de Whitman. Su papel en la jornada fue actualizar el estatus de la llamada Converged Cloud Initiative.
En plan didáctico, Veghte, explicó su visión de cuatro modelos de entrega de la tecnología. Partió del datacenter tradicional (“que seguirá creciendo y será un mercado importante para nuestros servicios”) y se extendió sobre tres modalidades de cloud computing. “No se trata de optar entre el datacenter tradicional y el mundo de la nube, sino de facilitar a los clientes la continuidad de sus inversiones precedentes y, al mismo tiempo, sacar partido de las nuevas opciones a su alcance”.
Volviendo a las palabras iniciales de Meg Whitman, es oportuno quedarse con estas, por lo que pudiera subyacer en ellas: “tenemos necesidad de agudizar nuestro foco en las geografías clave. Como ocurre a muchas compañías de nuestro tamaño, 14 países representan el 80% de nuestros ingresos, pero operamos en 166 países. En esos 14 países de los que hablo, vamos a concentrar nuestra atención a corto plazo”.
Próxima cita, el 20 de noviembre, presentación de resultados del último trimestre del año. Después de todo lo que se dijo el pasado miércoles, es difícil esperar sorpresas.