Cuando Cisco anunció en 2009 su familia de servidores UCS, hubo cierta perplejidad: ¿qué pretendía un especialista de networking, segmento que disfruta de confortables márgenes, entrando en otro – afin, pero distinto – que se caracteriza precisamente por lo contrario, por una acelerada `commoditización`? Con aquella iniciativa, Cisco podía perturbar (y así fue) sus fructíferas relaciones con otros fabricantes, pasando a competir con ellos. Quedaba claro entonces, y más ahora, tres años después, que Cisco ponía sus miras en el cloud computing. Como el resto de la industria, sólo que el punto de partida es su posición en el datacenter. ¿Y qué pasa con los proveedores de servicios cloud?
Esta pregunta fue un hilo conductor de la conversación con Luis Palacios, director de negocio de datacenter, virtualización y cloud de Cisco, cuya responsabilidad abarca los países del sur de Europa. Las empresas, según IDC, representan más de dos terceras partes de la demanda mundial de servidores, pero el tercio restante de los presupuestos de TI procede de prestatarios de servicios de public cloud. Una proporción que tenderá a invertirse en los próximos años, estima la consultora.
A estas alturas, se puede dar por hecho que si Cisco entró hace tres años en el mercado de servidores no fue para competir con otro hardware commodity. Tampoco parece estar por la labor de bajar los precios. Mi impresión es que la estrategia de Cisco apunta más a equipar los datacenter de empresas que a los proveedores de servicios, que tienden a comprar máquinas más baratas. ¿Qué le parece esta interpretación?
Veamos primero los hechos. La mejor manera de valorar esta apuesta de Cisco es a través del número y calidad de los clientes. A tres años de lanzamiento de UCS, o poco más de dos años en España , actualmente hay más de 11.000 clientes únicos de UCS a nivel mundial, casi la mitad de la lista Fortune 500. En España ya tenemos un centenar de clientes únicos, o más incluso si consideramos empresas más pequeñas […] Llamamos clientes únicos a las grandes cuentas que tienen empresas o filiales independientes, pero a las que consideramos como un grupo. Un dato interesante es que un 30% de los clientes repiten, es decir que el producto les gusta, y cuando tienen que hacer ampliaciones vuelven a comprar un servidor de Cisco. .
[…] Es lógico que la oferta haya cambiado en tres años, pero ¿ha cambiado algo la arquitectura UCS en este tiempo?
No, la arquitectura no ha cambiado. Lo que sí ha ido cambiando son ciertos componentes de la arquitectura, como por ejemplo acaba de ocurrir para adoptar la evolución de los procesadores de Intel. Pero la arquitectura no ha cambiado. Esto es interesante porque la arquitectura que se diseñó fue rompedora, en el sentido de aunar el cómputo, la red y la memoria en un solo sistema.
¿Qué acogida está teniendo UCS entre los proveedores de servicios?
Tengo aquí una estadística, según la cual el 70% de los proveedores que han montado IaaS, lo han hecho utilizando servidores UCS. Y las razones que están dando es que pueden hacer lo mismo que con cualquier otra marca clásica, con menos elementos que gestionar: menos espacio, menos cables, menos componentes, menos refrigeración y, la mayor de todas las ventajas, mucha más velocidad para desplegar servicio, y muy fácil de integrar con los orquestadores de portales, porque el API de Cisco está completamente abierto, y da acceso al cien por cien del equipamiento y de lo que se puede hacer con él. Esto nos ha permitido alcanzar unos números excelentes […]
¿De cuánto es la aportación directa de UCS a la cifra de negocio de Cisco?
En términos anualizados, unos 1.300 millones de dólares al cuarto trimestre del año calendario 2011.
Estábamos en que la arquitectura no ha cambiado, entonces ¿qué hay de la estrategia? En estos años han cambiado tantas cosas…
Esta pregunta habría que situarla en el contexto de la estrategia que Cisco tiene para el datacenter, de modo que no es un componente unitario en el que sólo estaríamos nosotros, sino que es mucho más complicado. Me explico. Estamos en un punto de inflexión, en el que está cambiando la forma de consumir y entregar TI. Los datacenter, y dicho con todo respeto, las tecnologías tradicionales, no están preparadas para esos cambios; no son suficientemente eficientes, no son simples ni ágiles. Y esto ocurre por las megatendencias que todos conocemos: movilidad, vídeo y cloud computing. Sumadas a las tecnologías que han ido ganando terreno en los últimos cuatro o cinco años, como Fiber Channel sobre Ethernet y, por encima de todo, la virtualización. La estrategia de Cisco se resume en que es imprescindible dejar de entregar y consumir las TI como lo hemos hecho toda la vida.
¿Entonces?
Lo que decimos es que la tecnología que ahora tienen los datacenter, es muy probable que sea subóptima: hay demasiados silos, desconexiones entre unas y otras tecnologías, infrautilización de los activos, duplicidades, sobrecarga en la gestión, etc. Lo que recomendamos es empezar ya mismo la transición, dejar de hacer las cosas como siempre, y empezar a hacerlas de forma distinta. Creemos que el primer paso es tener un enfoque arquitectónico […]
¡Vaya, aquí tenemos otra vez la arquitectura!
En principio, podría parecer más lógica una aproximación de proyectos independientes por tecnologías, con un retorno más corto y beneficios en ciertas áreas. Pero creemos que incluso así los beneficios son subóptimos. Con un enfoque arquitectónico, nuestros clientes empiezan a ver una reducción en el coste total de propiedad, una mejor eficiencia operativa, para luego acelerar y cumplir con los imperativos del negocio. Hoy día, las circunstancias aconsejan ir hacia una virtualización masiva, automatizada, en los datacenter, que es donde más impactan esas tendencias. Hay que consolidar activos, estandarizar las operaciones, virtualizar masivamente. Este sería el estadio en el que todos querrían estar dentro de dos o tres años: dejar de hacer cosas en silos, de forma subóptima, y pasar a usar nuevas herramientas.
En resumidas cuentas, el funcionamiento de los datacenter tiene que cambiar, según Cisco.
El cambio de paradigma está clarisimo. Y no es que lo diga Cisco; hay un estudio de IDC del año pasado, que dice que en la próxima década los servidores se van a multiplicar por 10, la cantidad de información por 50 y el número de servicios será 75 veces más alto… pero el número de profesionales sólo se multiplicará por 1,5. Los centros de datos con la tecnología tradicional no están en absoluto preparados para entregar a ese ritmo y que se consuma de manera eficiente.
Al comienzo he sugerido que los servidores UCS están concebidos más para el datacenter de empresa que para las necesidades de los proveedores de servicios.
Y yo digo que nuestros servidores están orientados a ambos segmentos, al empresarial y a los proveedores de servicio. Lo que hay que entender es que en el entorno cloud aparece la figura del cloud provider, que no tiene necesariamente por qué responder al perfil de proveedor de servicios de telecomunicación. Por ejemplo, trabajamos con Indra y Nexica, y con otras empresas que llamamos cloud builder. Pero también entre los primeros se encuentran partners tan importantes como BT y Colt.
En este intercambio se nos ha caído la cuestión del precio. Cisco tiene la reputación de ser cara ¿Cómo se hace para competir con servidores ´commoditizados`?
Sí, fue una percepción que hubo al principio, pero que ahora no se sostiene. A título de ejemplo, si comparamos 14 blades del fabricante A con 14 de Cisco, este mete dos componentes adicionales: el fabric interconnect, y la conexión de este con los servidores; esto, obviamente, cuesta más, y lo inmediato que se piensa es que es más caro, pero si a lo que ofrece el fabricante A le ponemos encima la red, y comparamos los dos, ya no hay tanta diferencia. ¿Qué ha pasado? Que nuestra estrategia comercial ha funcionado, y hemos logrado que los clientes lo entiendan.
¿Con qué resultados en el mercado?
Cisco tiene servidores en rack optimizados y blade; no así en los rack de gama baja. En los blade, que es la categoría más grande puesto que duplica a las otras dos, ha pasado a ser el número 3 del ranking mundial, partiendo de cero hace tres años, según cifras de IDC del último trimestre de 2011. Un crecimiento que supera el del mercado total.
Un reproche que suele escucharse a la estrategia de Cisco es que quien compra UCS queda amarrado al hardware de red de la compañía, lo que tampoco sería tan raro, habida cuenta del peso que tienen los switches Nexus en ese mercado. ¿Es así?
Puede parecer que es así, pero no lo es. En el sistema en sí, con sus seis componentes, todo lo funciona dentro es de Cisco, es decir que hemos adoptado ciertas tecnologías que están implementadas en Nexus. Que pueden estar o no en el datacenter, pero las utilizamos dentro de UCS. Ahora bien, si uno de nuestros servidores llega al datacenter, mientras tenga cuatro cables (dos para almacenamiento y dos para datos), lo que haya en el datacenter da igual de qué fabricante sea, es interoperable al 100% desde el primer día. Ahora bien, si el cliente tiene Nexus, obtiene beneficios adicionales de UCS, no porque los necesite, pero es una propuesta de valor que nos diferencia. ¿Qué son cada uno de su padre y de su madre? Pues no hay problema, funcionan igual de bien. No tiene nada de particular que si el cliente va a cambiar el acceso, recomendemos el nuestro, porque se va a ahorrar un 80% en cableado, otro tanto por ciento de consumo eléctrico, sin contar los costes ocultos de gestión, el espacio, etcétera. O sea que el reproche no es justo.
¿Cuál es la relación entre lo anterior y el concepto que Cisco defiende de cloud computing?
Lo hemos llamado Cloudverse. Se trata de integrar aplicaciones dentro del datacenter, redes inteligentes y habilitar servicios que no tienen por qué ser nuestros. Utilizando este concepto de cloud computing, que no es más que un modelo de negocio, resulta que esos servicios son consumibles desde cualquier lugar, en cualquier momento y con cualquier dispositivo. Y esto, a través de los proveedores de servicio o por empresas de cualquier tamaño, integrando las tecnologías en modo público, privado o híbrido. Lo que pretendemos es ayudar al proveedor y al cliente final; y, sobre todo, dotar de inteligencia a la red, porque no es lo mismo priorizar voz que vídeo [ …]. La estrategia es capacitar los servicios cloud, para reducir gastos en el TCO. No se trata de competir con los partners sino de ayudarles; nuestro objetivo principal es que construyan su cloud, que haya un ecosistema con soluciones cloud integradas. ¿Por qué Cisco tiene que estar ahí? Porque si el cloud existe es gracias a que existe Internet, que es una red de redes, y todo lo que tenga que ver con la red nos interesa, es nuestra carta de naturaleza.