La comunicación, la habilidad emocional, la confianza y la vulnerabilidad son las características más demandadas para los líderes empresariales actuales. Nuestra relación con el trabajo – y nuestras expectativas al respecto- han cambiado drásticamente, según un estudio mundial de HP. El Índice sobre la Relación con el Trabajo, estudio realizado a más de 15.500 personas en 12 países, revela que para más de la mitad (57%) de los trabajadores españoles, sus expectativas sobre su relación con el trabajo han aumentado en los últimos tres años, así como el trato que esperan recibir en su lugar de trabajo (54%). Sólo el 20% afirma que los líderes de su empresa no está a la altura de sus expectativas.

¿Cuál es la conclusión? La gente necesita por parte de sus trabajos y de sus jefes cambios urgentes para que se alineen con sus expectativas. Cualquier carencia no sólo afecta a los empleados: la productividad disminuye y la moral, la conexión y el compromiso del equipo se debilitan. De hecho, más de un tercio de los trabajadores mundiales afirma que se desvincula del trabajo cuando la relación no es saludable y un número similar (38%) se siente desconectado de su organización. En cambio, dos tercios (66%) de los empleados con una relación sana con el trabajo confían en las decisiones de sus líderes. Más que los que se enfrentan a una relación poco saludable con el trabajo, estas personas confían en que los altos directivos de su empresa entienden sus necesidades y escuchan sus ideas y preocupaciones, y en general se sienten más conectados.

Al analizar los factores determinantes de este estudio, hay tres que llaman la atención, especialmente cuando se trata de crear una plantilla más feliz. La satisfacción de los empleados, el desarrollo de un enfoque centrado en las personas y predicar con el ejemplo.

Fluidez emocional y satisfacción de los empleados

La comunicación es una vía de doble sentido. El 63% de los trabajadores españoles afirma que es importante animar a las personas a comunicar sus verdaderas emociones en el lugar de trabajo. Sin embargo, los líderes también deben dar ejemplo demostrando su propia sensibilidad emocional. De hecho, casi tres cuartas partes de los líderes empresariales mundiales afirman que su éxito depende de ser emocionalmente inteligentes. Es más, los trabajadores afirman que renunciarían al 11% de su salario por trabajar en un lugar con líderes empáticos.

Los empleados también quieren que su trabajo tenga más sentido que nunca. Las empresas pueden ayudarles a sentirse más realizados dándoles más voz y protagonismo. En la práctica, esto podría significar ofrecerles más voz en el trabajo que hacen y en cómo se define el éxito, así como equilibrio y espacio para que su vida personal también tenga sentido, y mayor respeto y confianza. En la actualidad, sólo un máximo del 29% de los trabajadores experimenta estos elementos de forma sistemática.

Confianza: practicar lo que se predica. Un enfoque centrado en las personas.

La confianza es difícil de ganar en el lugar de trabajo. Un tercio de los empleados mundiales encuestados dice desconfiar de las intenciones de los equipos directivos, mientras que otro 20% no está seguro, y sólo una quinta parte está de acuerdo en que los estilos de liderazgo han evolucionado en función de las nuevas formas de trabajar en los últimos dos o tres años. En este contexto, un énfasis visible en dar prioridad a las personas y garantizar que los empleados sean vistos como seres humanos y no como meros ejecutores.

Ahora que los trabajadores reconocen la necesidad de dar mayor prioridad a su bienestar mental y físico, los empresarios deben asumir su papel para ayudarles a conseguirlo. El 69% de los trabajadores españoles afirma que debería ser la prioridad, aunque esté por encima del trabajo. Sin embargo, menos de una cuarta parte (23%) lo experimenta de forma constante. Es más, los empleados son menos positivos que los líderes empresariales en cuanto a lo que tienen a su disposición en términos de flexibilidad, autonomía y equilibrio entre trabajo y vida privada: de media, menos de una cuarta parte de los trabajadores españoles dice experimentar estos elementos de forma constante, frente al 43% de los líderes empresariales. El 69% de los empleados afirma que es importante que los altos directivos den ejemplo en lo que se refiere al equilibrio entre trabajo y vida personal, practicando el trabajo flexible, así como fomentando y defendiendo estos comportamientos de forma más general.

Liderar con empatía por encima de la perfección

Para los líderes empresariales, esto puede significar abrirse a los comentarios del equipo y asumir cuando se equivoquen. Los empleados señalan que está bien que los líderes no sepan siempre la respuesta, que bajen la guardia y muestren sus verdaderas emociones, que lideren con autenticidad. Casi tres cuartas partes de los trabajadores mundiales del conocimiento encuestados afirman que es importante que los altos directivos reconozcan sus errores, mientras que el 68% afirma que es importante que se comuniquen con transparencia sobre temas difíciles, como los despidos o los presupuestos. Sin embargo, sólo una quinta parte de los trabajadores está de acuerdo en que los altos directivos de su empresa demuestran inteligencia emocional de forma sistemática.

El estudio nos indica claramente que tanto los líderes como los empleados piensan que es necesario un conjunto de habilidades de liderazgo diferente para tener éxito en los negocios hoy en día. Los altos cargos y directivos deben demostrar empatía y una mayor inteligencia emocional, y se ganarán el respeto de sus empleados si lo hacen. El estilo de liderazgo más humano y abierto que cobró importancia durante la pandemia debe redescubrirse y preservarse para que los líderes -y las relaciones con el trabajo que desempeñan un papel clave en su fomento- prosperen en el futuro.

La IA como clave para mejorar la relación con el trabajo

Además, en la última versión de este estudio que ha estado centrado en la IA, hemos podido comprobar el potencial que tiene para transformar las actuales dinámicas de trabajo y mejorar las relaciones laborales promoviendo espacios de trabajo más dinámicos y creativos.

Sabiendo aprovechar sus beneficios y con una integración estratégica representa una oportunidad de progreso en los entornos laborales. Los datos avalan está acogida positiva de la IA, ya que el 81% de los líderes empresariales españoles cree que la IA facilitará su trabajo y el 54% de los trabajadores del conocimiento españoles cree que la IA les abrirá nuevas oportunidades para disfrutar del trabajo