2010 es un año crítico para Nokia. En todas las acepciones de la palabra. Cuando Kallasvuo fue promovido a su cargo actual, los grandes rivales se llamaban BlackBerry y Windows Mobile; hoy son otros: Apple y Android, que se han apoderado de la iniciativa en el mercado de los smartphones. Aunque la marca finlandesa sigue detentando el primer puesto en el ranking mundial de móviles, en el retrovisor ya puede ver la imagen de Samsung, todavía distante. En el segundo trimestre, Nokia vendió 111,1 millones de móviles, un 8% más que el año pasado por estas fechas, y su cuota global descendió dos puntos, del 35 al 33% según estimaciones de la compañía. Los problemas empiezan cuando se detallan esas cifras. Primero, el desglose geográfico. En Estados Unidos, sólo vendió 2,6 millones de dispositivos, “una pérdida neta de cuota de mercado que ha favorecido a Apple y Android”, comenta Neil Mawston, de Strategy Analytics. También en Europa ha perdido dos puntos porcentuales, en este caso a manos de Samsung, y sólo en China y América Latina ha conseguido incrementar sus ventas. En segundo lugar, ¿de qué móviles se trata? Sus ventas de smartphones – 24 millones de unidades – crecieron un 42%, lo mismo que el mercado, y en consecuencia ha recuperado la cuota de un año atrás (40,3%) que había descendido un punto y medio en el primer trimestre. Muy por delante de BlackBerry (18,8%) y Apple (14,1%). Vender 4,4 millones más que sus dos perseguidores combinados es sin duda una buena noticia, algo ensombrecida por esta otra: el precio medio ha bajado en un año de 233 a 143 dólares. Los resultados trimestrales son reveladores. Los ingresos crecieron algo menos del 1%: de 9.910 millones a 10.000 millones, pero los beneficios cayeron un 40%, a 227 millones de euros (en parte hundidos por las pérdidas de Nokia Siemens Networks). Otra perspectiva: si se hace el ejercicio de igualar su acción con la de Apple en el momento del anuncio del iPhone, una ha perdido el 68% de su valor, mientras la otra duplicaba el suyo. Así todo se entiende mejor.