Los despliegues de redes WiMax sigue creciendo, y ya abarcan 430 millones de POP (puntos de presencia) en todo el mundo, por lo que se espera alcancen un total de 800 millones a finales del 2010, según el estudio del WiMax Forum que llega a la siguiente conclusión: “esta tecnología está siendo adoptada por los proveedores tradicionales de Internet para entrar en el negocio móvil, así como por los nuevos operadores, como arma contra los incumbentes, que se inclinan por el desarrollo de LTE”. A marzo de 2009 había, según el estudio, 468 despliegues de WiMax – el doble que un año antes – en 139 países. Si se considera el número de usuarios finales, las cifras varían.
Sólo en el primer trimestre, el ritmo de crecimiento fue del 75%, hasta un total de 3,5 millones. No obstante, otros informes mencionan una caída en la rentabilidad de los servicios, cuyo primer argumento competitivo ha de ser necesariamente el precio. ¿Será esto un freno al ritmo de instalaciones? La consultora Infonetics opina que no lo es: el año próximo se materializará un crecimiento postergado por la crisis que ha afectado la inversión de capital en todos los segmentos de las telecomunicaciones.
La empresa israelí Alvarion, uno de los líderes en esta tecnología, afirma haber consolidado su cuota de mercado, ganando clientes durante los últimos meses. Sus resultados trimestrales, dejan una impresión dual: estancamiento en las ventas y un 29% de incremento en los ingresos (51 millones de euros). Tras gozar de una trayectoria ascendente durante varios trimestres, es inocultable que la demanda afloja, como le ocurre al resto de la industria de telecomunicaciones. También para esto tienen explicación los imperturbables directivos de Alvarion: las normas vigentes obligan a no contabilizar los ingresos hasta que la entrega haya sido aceptada por el cliente.
Entretanto, Alvarion, que tiene unos 250 despliegues en distintas partes del mundo, se ha apuntado una carta importante para su futuro al ampliar el acuerdo de OEM con Nokia Siemens, por el cual este vendedor de infraestructura (que, pese a su nombre compuesto es controlada de facto por su componente finlandés) revende las soluciones de la empresa israelí con estándar 802.16e. Para NSN, WiMax es una solución de bajo coste a su principal problema: concentrar las fuerzas de I+D en LTE para resistir a la fortísima competencia del fabricante chino Huawei, sin renunciar a esta otra tecnología 4G.
Aunque la tecnología WiMax se considera generalmente, por su eficiencia, apropiada para las áreas emergentes del mundo, lo cierto es que su implantación se va abriendo camino en Europa; varias novedades recientes lo confirman. Por un lado, la solución 4motion, de Alvarion, ha sido seleccionada por un operador alternativo italiano para implantar una red 4G de servicios inalámbricos de banda ancha; por otro, en Francia, se desarrolla una prueba piloto en la Costa Azul, a cargo del operador Bolloré Télécom. En España, Alvarion ha sido escogida por Iberbanda [ver recuadro] para la ampliación de su capacidad de banda ancha en Cataluña. Pero también llegan noticias de Estados Unidos: el operador independiente Open Range ha recibido recursos del departamento de Agricultura para dar servicio con WiMax en áreas rurales con 6 millones de usuarios; la tecnología elegida es de Alvarion, y el monto del contrato ronda los 100 millones de dólares.