El ruido producido por la aparición del iPad se ha atenuado, o ha sido reemplazado por otros ruidos, pero la batalla de los tablets (o tabletas) está en el ambiente. Los rivales han sido pillados por sorpresa, pero tendrán que responder para que Apple no se les escape. Cualquier visitante ha podido contar la semana pasada, en la feria Computex, no menos de una docena de prototipos con los que la industria taiwanesa quiere tomar el mando del contraataque. No está claro el cómo: las líneas de fuerza sobre las que ha de actuar son múltiples (procesador, sistema operativo, pantalla, aplicaciones… y marca). Entre unas cosas y otras, Apple disfrutará de casi un año de gracia, a sus anchas.
Cuando HP canceló abruptamente el Slate, proyectado en común con Microsoft, pudo pensarse que esta había caído sin entrar en combate. Los primeros tablets de Asus Eee Pad (EP121), de 12 pulgadas, y EP101TC, de 10 pulgadas) indican lo contrario: que Windows dará pelea, y estará entre las opciones de software de la categoría ascendente. Los procesadores son Intel Core Duo y Nvidia Tegra, respectivamente, y puede que estas primeras configuraciones no sean definitivas, porque no se venderán antes de que se logre el acopio de un número suficiente de aplicaciones, para no deslucir ante la abundancia del iPad. Esta será la prueba de fuego para cualquier competidor que no quiera sucumbir frente a la ventaja del primerizo.
Como era de esperar, Android se perfila como alternativa, y un primer dispositivo, seguramente provisional, se llama Dell Streak, con procesador Qualcomm; pero con sólo 5 pulgadas de pantalla, se hace difícil aceptarlo como competidor del iPad, que tiene 9,7 pulgadas. Más bien parece que la marca tejana no tuviera más salida que recurrir a una categoría híbrida, la misma que el año pasado – también en Computex – se diera en llamar smartbook, y que Gartner etiquetaría como smartphone. De hecho, es también un móvil, y en Reino Unido lo comercializa O2, filial británica de Telefónica.
Jen Hsun Huang, CEO de Nvidia, animó el cotarro de la feria de Taipei al sostener que los fabricantes de hardware deberían unirse en torno a Android, el sistema operativo más adecuado para un tablet. “Windows es demasiado pesado – dijo – mientras que [el sistema operativo de] Google es el único que puede enfrentarse a Apple”, razonó. Ambos ofrecen capacidades multitarea, y cuentan con desarrolladores y sendas tiendas de aplicaciones. En la práctica, el paisaje es más complejo: Compal, que fabrica bajo contrato, está desarrollando tablets para varias marcas, tanto con Windows como con Android y MeeGo, pero es todo lo que se ha dejado filtrar.
Para reforzar la idea de pluralidad entre los postulantes de la categoría, bastaría con añadir la presencia en la línea de partida de Qualcomm, cuyo Snapdragon de 1 Ghz hace funcionar el tablet Huawei S7, con pantalla de 7 pulgadas y sistema operativo Android 2.1. La expansiva marca china ha dotado a este modelo de las características que lo hagan merecedor de la atención de los operadores de telecomunicaciones, que necesitan contar con puntos de apoyo propios ya que Apple – nada sorprendente – les deja poco juego en el modelo de comercialización del iPad.
En tanta diversidad no podía faltar Intel, pese a estar convencida de que “en la escala de la industria del PC [el tablet] es relativamente insignificantes, un dispositivo de consumo que no cogerá cuota a los netbooks (Paul Otellini dixit). Aun así, Intel anunció en Taipei sus planes para producir un prototipo de Oak Trail – otra variante de la familia Atom – orientado directamente hacia una categoría que no ha de ser tan insignificante cuando Intel le concede un espacio central en su stand de Computex. No ha sido tan concluyente la información sobre el sistema operativo con el que podría acoplarse Oak Trail: su arquitectura parece inclinarlo hacia Windows 7, mientras la estrategia apuesta por MeeGo; al mismo tiempo, hay indicios de aproximación entre Intel y Google, quizás no referidos a Android pero sí a confluir en torno a Chrome OS. Un verdadero jardín, ¿no es cierto?